viernes, 19 de julio de 2013

CRITICA de ARTE | NOA-NEON | Lic. Natalia Da Rold



NOA - NEÓN   Tributo a la infancia, es el título bajo el cual Renata Würschmidt  interpreta reminiscencias de su ciudad natal Tucumán, refiere al interior de una imaginación poética e ingenua  que nos abre un pasaje recóndito  de la iconografía del  Noroeste Argentino, borrando  límites entre realidad y ensoñación, intenta tocar una pulsión del tiempo recorrido, con la explosión del color iridiscente, provocando una relación cuasi mágica entre la obra y el espectador.


Sus obras son el fruto de  una interrogación sobre el presente, los lazos familiares, sociales, a partir de su experiencia y su historia personal.
Crea archivos visuales, mediante la repetición de una trama perceptiva de sustento, donde se conjuga pasado, pasión, recuerdos, juego, fantasía, sumergidos en un telón de zafra donde se volatiliza hasta el color mismo.

En Pirpintos arrebolados la artista juega con la mirada cotidiana, con el día a día, un retornar a las raíces, volver a encontrarse, logrado con desenfado y  espontaneidad; atesora el ingenio como juego en la memoria sobredimensionado en la estructura compositiva de la obra, donde el  ritmo de los grafismos parece evocar distintas travesías e impensadas aventuras.
La efervescencia cromática producida por la luz negra brinda al espectador una experiencia hipnótica.

Todas las obras  de la colección proponen para Würschmidt  describir oníricamente un sentido del paso del tiempo Ingenioso limón, Mi pequeño Pucky ,  Mariquita caña alta imágenes explícitas, dibujadas detalladamente sobre las manchas acromáticas en contraste con planos de pigmentos plenos, limpios, simbologías que contextualizan experiencias significativas de la artista, desmenuzadas todas en el recuerdo de una niñez vivida, de un tributo a la infancia.

Divertida, incisiva, glamorosa, un poco en serio, un poco en broma, Renata  trasciende la bidimensión con una instalación, diversos clichés que identifican el recuerdo inocente, ingenuo, objetos intervenidos, como la  Bici "Un paseo por Raco" y el algodonero " de chicos, comíamos nubes" donde imagina, crea , pega telas, pinta, todo sobre estructuras que ella misma prepara.

Vigor y  eficacia  en el tratamiento del color y la técnica, acrílico, caucho, sintético fotoluminiscente, obras que interpelan los sentidos a través del flúo,  que no le permiten al espectador asumir pausas, dispara la oportunidad de interacción con la misma,  lo que en cierto modo nos ayuda a continuarla, completarla o reinterpretarla bajo los efectos de la luz negra, recordándonos la premisa de Las ventanas de Charles Baudelaire  en ese espacio negro o luminoso  vive la vida, sueña la vida, sufre la vida.

Curadora Lic. Natalia Da Rold

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